Barcelona y el acero inoxidable

Desde su invención a principios del S. XX, el acero inoxidable ha sido un aliado perfecto para el sector de la construcción debido a sus características: buena ductilidad, resistencia a la oxidación, dureza, resistencia a temperaturas extremas y elasticidad, entre muchas otras.

Por este motivo, en todas las ciudades del globo, observamos continuamente la presencia de este material en edificios y mobiliario urbano. En este artículo, queríamos hacer un homenaje a la ciudad de Barcelona, y su relación con el acero inoxidable a través de tres edificios emblemáticos.

Sagrada Familia

En el proceso de construcción de uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, ideado por el arquitecto Antoni Gaudí, en el año 2014, se decide que el elemento estructural de la basílica a partir de entonces así como el de las seis torres centrales será el acero inoxidable. La decisión estuvo motivada por la dificultad y el elevado coste que supondría cualquier intervención en el futuro, debido a la oxidación del acero de la estructura a partir de cierta altura.

Debido a sus propiedades, trabajan con acero inoxidable dúplex, concretamente con el 2205, una aleación de hierro y cromo en un porcentaje que va del 18% al 38%, además de contener níquel en un porcentaje menor, de entre el 4,5% y el 8%. Sin embargo, una mitad de su estructura es austenítica, lo que le confiere ductilidad y resistencia a la corrosión, mientras que la otra es ferrítica, lo que le aporta propiedades mecánicas. Esta circunstancia hace que presente una mayor protección ante la corrosión y una mayor resistencia mecánica que el resto de tipos de hierro.

Peix (Pez) de Frank Ghery

Barcelona 1992 acogía los juegos olímpicos transformó, entre otras cosas, su fachada marítima, recuperando frente mediterráneo para un uso ciudadano. Nacía entonces el nuevo puerto olímpico, protagonizado por dos torres; por un lado, la torre Mapfre y por otra, el Hotel Arts. Es a los pies de este edificio, mirando al cielo, donde Frank Gehry instaló una escultura con forma de pez de 56 metros de largo y 35 de altura.

Realizada sobre una estructura metálica, es su capa exterior, está construida en acero inoxidable de color dorado, la que otorga belleza y singularidad a la creación. En función de la intensidad de la luz y del reflejo de los rayos solares sobre ella, esta capa exterior parece convertirse en una piel escamada que llena de vida al inanimado objeto, visible ya desde la playa de la Barceloneta.

Mercat dels Encants

El Mercat dels Encants Vells, es uno de los mercados más antiguos de Europa (algunas referencias datan su origen en el siglo XVI). Organizado tradicionalmente de manera informal en la calle al aire libre, en los últimos años Els Encants reunía en sus 15.000 metros cuadrados casi 500 puestos de antigüedades. En 2008, el Ayuntamiento convocó un concurso de ámbito europeo para la construcción de un nuevo recinto en que alojar el mercado de forma definitiva.

La propuesta ganadora planteó una plataforma continua en varios niveles, entendiendo el mercado como una gran plaza cubierta capaz de infundir actividad, y mantener carácter abierto y de mercado tradicional. Esta cubierta, suspendida a modo de palio a casi 25 metros de altura, convierte el mercado en un elemento reconocible como equipamiento urbano de primer orden y protege del sol y la lluvia a comerciantes y usuarios. Diseñada con el objetivo de transmitir una sensación de ligereza, maximizando al mismo tiempo la iluminación. Su cara inferior, de acero inoxidable Super Mirror Nº8, genera un techo de múltiples planos quebrados que se convierten en un mecanismo de reflexión de la ciudad hacia el interior del mercado.